Apropiación de la calle Cascorro que parece ser atacada desde cada vía que desemboque a ella, para seguir fluyendo en bloques compactos por la calle de la Ribera de Curtidores. Maletas, valijas, baúles, cajas, mochilas, carritos...como botines de piratas que asaltan y al final un escenario que semeja una deconstrucción, una devastación, carcasas abandonadas por doquier con el ruido aun alojado en cada caja o desperdicio que tiene los minutos contados.
miércoles, 23 de septiembre de 2009
Rastro Madrid
El rastro es un modo de vida, son viejas propiedades en transito, canjes, transacciones, zozobras, multitud, inquietud y magia de aquello que ha servido y se resiste a dejar de ser útil. Es ruido de naciones, conversaciones y discusiones en simultánea, son esos absurdos e inútiles elementos que no pueden hacer a menos que continuar exhibiendose cada domingo.
Apropiación de la calle Cascorro que parece ser atacada desde cada vía que desemboque a ella, para seguir fluyendo en bloques compactos por la calle de la Ribera de Curtidores. Maletas, valijas, baúles, cajas, mochilas, carritos...como botines de piratas que asaltan y al final un escenario que semeja una deconstrucción, una devastación, carcasas abandonadas por doquier con el ruido aun alojado en cada caja o desperdicio que tiene los minutos contados.
Apropiación de la calle Cascorro que parece ser atacada desde cada vía que desemboque a ella, para seguir fluyendo en bloques compactos por la calle de la Ribera de Curtidores. Maletas, valijas, baúles, cajas, mochilas, carritos...como botines de piratas que asaltan y al final un escenario que semeja una deconstrucción, una devastación, carcasas abandonadas por doquier con el ruido aun alojado en cada caja o desperdicio que tiene los minutos contados.
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1 comentario:
Hola Lenis(z) proprio bella questa foto!!! mi ricorda dei bei momenti...bacioni... Dario
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